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Soñadores

"Lo que creamos mientras dormimos: el poder
narrativo de los sueños" (Fundación GABO)

Inquietud

Por: Rosalba Quintero Giraldo

Docente.

En un lugar que no me queda claro, me encuentro en compañía de un niño de aproximadamente 5 años, delgado, de piel trigueña y cabello oscuro. Pero no estábamos solos, estábamos rodeados por más jóvenes, al parecer estudiantes.

No recuerdo bien, pero creo que el chico a mi lado venia de hacer un mandado; y al mirarle el rostro, encuentro que tiene dos golpes, abultados como dos pequeñas montañas, lo miro de pies a cabeza y veo que tiene los mismos golpes en los pies.

El sueño finaliza ahí, así, sin más, pero al despertarme me genera gran inquietud la causa de los golpes de aquel niño. 

La casa de mis abuelos 

Por: Jorge Armando Ardila.

Docente.

Mi  sueño se ubica en la casa de mis abuelos; la cual  estaba habitada hasta hace  a   aproximadamente  15 años por gran parte de mi familia paterna. Aparecen en este sueño  varios de mis tíos que  ya  se encuentran muertos. Era una casa grande de bareque  con un corredor inmenso  donde tíos  y sobrinos  jugábamos  fútbol allí y las porterías las hacíamos con las sillas del comedor.

En mis sueños aparecen olores, como el de la carne frita de mi abuela, que tenía un sabor inolvidable. Escucho las risas de mis tíos, sus carcajadas y sus voces gruesas; como “vozarrones “.

Algo me dicen mis tíos en el sueño, pero no logro recordarlo, y cuando desierto me  recibe el alba con una gran tristeza y nostalgia  de saber que mis tíos y gran parte de mi familia paterna ya no habitan esta tierra. 

Lo recurrente en mi sueño es el árido de fútbol en compañía de mis tíos, me encontré en el corredor de la casa meciéndome en la silla de mi abuelo  con su sombrero puesto en mi cabeza tal cual  como era el de mi abuelo y él me declamo un poema que contenía la siguiente frase: dejad que tus sueños vuelvan a mí.

El sueño del cual no quiero despertar 

Por: Ángela María Posada Díez

Docente de Inglés

¡Que hermoso paisaje! No puedo creer lo que ven mis ojos. Es maravilloso volar. El viento acaricia suavemente mi cara. Es frío pero agradable. Que cantidad de agua. Su color verde intenso pero a  veces azul, me invita a lanzarme de lleno a sus profundidades. Lo intentaré. No soy la mejor nadadora pero….

Oh no. Era un sueño. Pocas veces sueño. O tal vez si lo haga, dicen los que saben del tema que todo ser humano sueña en cada momento que duerme; lo que sucede es que pocas veces nuestro Ser consciente lo recuerda.

Yo, la verdad, no creo eso pues por más que lo intento no logro traer a mi mente y a mi consciente alguna escena vivida en mi sueño. Sólo existe un sueño recurrente en mí desde hace muchos años. Sueño que voy volando, no tan alto, pero vuelo. En mi sueño veo paisajes con mucho verde y azul. Sueño que voy sobrevolando extensos lagos, inmensas cantidades de agua limpia, muy limpia.

Veo también mares. Siento un gran placer al hacerlo. Siento una paz absoluta mientras el viento me refresca. No recuerdo si voy sentada o boca abajo. Sólo sé que no me canso. Todo lo contrario: me relajo de pies a cabeza. Es como una sinfonía infinita con el Universo. Es un sueño que se repite no tan frecuente pero del que nunca quisiera despertar.

Ahora, solo en sueños la puedo ver

Por: Manuela Becerra Vanegas

Integrante Página 18.

No sé por qué, pero la vi, no sé cómo, pero la contemple; percibí su silueta tal y como era, su altura, sus rasgos, toda ella estaba igual. Sin embargo,  ella huía de mí,  ¿Por qué lo  hacía? ¿Acaso yo me lo merecía? ¿No quería encontrarse conmigo?  A pesar de no tener las respuestas para aquellas preguntas y de que ella huyera de mí, yo decidí seguirla.

Y llegamos a una vieja casa,  y al llegar allí, me vinieron a la mente muchos recuerdos, todas las imágenes de las fotografías que me mostraba, y todas las historias de las que me había hablado en el pasado, todo estaba allí. Y allí, también estaba ella con su esposo, ese hombre encantador que no conocí jamás, y ella era feliz, tan feliz como en esas historias que me había relatado.

Yo también fui feliz al contemplar su felicidad, pero pronto desperté y tuve que afrontar la dura realidad, la realidad de que ahora mi abuela no está más aquí conmigo, y de que ahora, solo en sueños la puedo ver. 

My dream (Mi sueño)

Por: Juan Camilo Soto

Estudiante

So many thoughts come to mind when I try to find a good answer for that unexpected and hard question: What do I dream? So that sometimes it seems impossible to get out of the cage and admire the great of reality, the great of living in this world and the infinity of opportunities I have.
I dream of dreaming, I really want such huge things to happen but I usually hesitate, and I do not know what to decide, what is wrong or right or what I really want. This happens to me every time when someone asks me “What do you dream?” Because I imagine a whole world of peace, happiness, where we are all united, where we all respect each other, where we help unconditionally. However, it is more a hope that a dream, so maybe my dream is to find true love, in case there is. I do not dream of material things, I just want comfortable and not luxuries so I work to achieve that every day.

I have a dream of learning many things, and visualizing me in the future, my main dream is to have a family, made up by a happy couple and many children, depending on the situation and context I will live in, but I would like about two or three kids. Moreover, I want to live in a house with a big backyard to play with the kids and relax among nature.
I also dream of flying and going through different worlds, and that is why I read literature, and mentioning my hobbits, I want to learn to play any instrument, preferably piano and violin.
 

As a career dream, I want to become an excellent professional, in whatever I decide to do, but as a passion or vocation, I want to be a teacher, a teacher that would be able to change lives for good, to contribute to a better tomorrow.Finally, I dream of chasing my dreams and make them come true; though, they look impossible, I always want to keep my hopes, and to think that we will have a good or even better tomorrow. 

Traducción

Se me ocurren muchos pensamientos cuando trato de encontrar una buena respuesta para esa pregunta inesperada y difícil: ¿Qué sueño? De modo que a veces parece imposible salir de la jaula y admirar lo grandioso de la realidad, lo grandioso de vivir en este mundo y la infinidad de oportunidades que tengo.
Sueño con soñar, realmente quiero que sucedan cosas tan grandes, pero generalmente dudo y no sé qué decidir, qué está mal o qué es lo que realmente quiero. Esto me sucede cada vez que alguien me pregunta "¿Qué sueñas?" Porque imagino un mundo entero de paz, felicidad, donde todos estamos unidos, donde todos nos respetamos, donde ayudemos incondicionalmente. Sin embargo, es más una esperanza que un sueño, así que tal vez mi sueño es encontrar el amor verdadero, en caso de que exista.

No sueño con cosas materiales, solo quiero comodidad y no lujos, así que trabajo para lograrlo todos los días.

Sueño con aprender muchas cosas y visualizarme en el futuro, mi sueño principal es tener una familia, formada por una pareja feliz y muchos niños, dependiendo de la situación y el contexto en el que viviré, pero me gustaría alrededor de dos o tres hijos. Además, quiero vivir en una casa con un gran patio trasero para jugar con los niños y relajarme en la naturaleza.
También sueño con volar y recorrer diferentes mundos, y es por eso que leo literatura y, al mencionar a mis pasatiempos, quiero aprender a tocar cualquier instrumento, preferiblemente piano y violín.


Como sueño profesional, quiero convertirme en un excelente profesional, en lo que decida hacer, pero como pasión o vocación, quiero ser un maestro, un maestro que pueda cambiar vidas para siempre, contribuir a un mejor mañana.
Finalmente, sueño con perseguir mis sueños y hacerlos realidad; aunque parecen imposibles, siempre quiero mantener mis esperanzas y pensar que tendremos un buen o incluso mejor mañana. 

Pesadillas de una persona sin importancia

Los siguientes dibujos reflejan las pesadillas más espeluznantes de Santiago Oquendo.

Integrante Página 18

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